IBEX 35
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Permíteme que te explique cómo decidí que la inversión en bolsa era el camino que quería seguir para rentabilizar mis modestas inversiones.

Todo empezó por una (creo que sensata) preocupación por cómo llegaría al momento de mi jubilación. La primera preocupación, y aunque parece remota, era siquiera si iba a disponer de una jubilación y la segunda, si la cantidad a percibir cubriría lo que a mi me gustaría. Al fin y al cabo son los últimos años de tu vida disponibles para disfrutar, tras más de 40 años de trabajo.

Esto me llevó por el camino más lógico: buscar planes de jubilación privados. Todo suena bien en un primer momento: ahorras la cantidad que te parezca oportuna (incluso algunos de ellos no te imponen una periodicidad) y además reduces tu base imponible, ahorrándote impuestos cada año. ¡Y encima el dinero genera intereses!

Pero (tenía que haberlo) pierdes la disponibilidad de esos ahorros hasta el momento de la jubilación. Es verdad, hay condiciones de rescate bajo las cuales es posible recuperar tus ahorros de forma anticipada, pero en cualquier caso, si estás en esas condiciones, estás realmente jodido y el disponer o no de tus ahorros de toda la vida no es el mayor de tus problemas llegados a esa situación.

Continué investigando y lo siguiente en que me fijé fueron los depósitos a renta fija y los fondos de inversión (en renta fija), cualquier cosa que sonara a renta variable me daba realmente pánico ¿quién en su sano juicio quiere jugarse su esfuerzo por un posible beneficio? Estos tipos de productos en general dan un buen nivel de seguridad aunque a unos intereses modestos. Aún así, frente a las ventajas fiscales que ofrecen los planes de jubilación, se me quedaban algo cortos.

Así pues, parece que la renta variable es la única opción restante y no demasiado descabellada como puede ser la inversión en futuros, derivados o CFDs. Pero mi conocimiento de este tipo de productos es muy superficial, necesitaría tiempo para conocer el mercado y las características de éstos, antes de ponerme a invertir en serio en cualquiera de estas opciones.

Llegados a este punto decidí meter la cabeza en la operativa de bolsa con un capital mínimo, así que contraté el broker de ING, invertí 1.000€ en una ETF que replica el IBEX (ahora mismo, se encuentra en valores bajos teniendo en cuenta su histórico y es de esperar que a medio / largo recupere el valor de 10.000 o más) y que además reparte dividendos y me daría unos meses a mi mismo para formarme y poder tomar decisiones con una mejor base.

Y en este punto me encuentro. En futuros posts explicaré más en detalle los distintos productos de los que he estado hablando e iré revisando los distintos libros que vaya leyendo y compartiendo mi opinión sobre ellos con todos vosotros.