Hoy he podido escuchar y ver en diversos medios de comunicación el anuncio de que la NASA realizaba el lanzamiento de su última misión espacial, Deep Impact, que transportará una nave cuya misión será estreyarse con el cometa Tempel 1 a una velocidad de nada menos que 37.000 km/h. El aplastante suceso ocurrirá el 4 de Julio del presente año, a una distancia 431 millones de kilómetros, un poco lejos para que cierto país pueda usar la explosión como si de fuegos artificiales se tratasen para celebrar la fiesta nacional que acontece el mismo día.